ENERGÍA Y RESPIRACIÓN

Como influye la respiración en nuestra energía y viceversa

Ya llevas un tiempo practicando yoga y a lo mejor has percibido que la energía se refleja en la respiración. Cuando estás tranquila, relajado tu respiración es pausada, lenta… pero también cuando estás aburrido y harta. Igual que cuando estás emocionada, contenta, respiras más rápido y también cuando sientes miedo o estás estresada. 

Por eso antes de empezar cada clase de yoga, nos tomamos un momento para notar nuestra respiración. Ver cómo está y percibir dónde se siente, dónde se mueve. 

Y por lo general cuando estás en esa observación inicial, las primeras respiraciones suelen ser más rápidas y a medida que vas llevando la atención a la respiración, los sentidos pasan de estar hacia afuera a poco a poco dirigirse hacia el cuerpo, tu respiración se alarga un poco más.

En yoga la respiración es el ritmo, indica a qué velocidad vas a realizar el movimiento porque lo que intentamos es que la respiración envuelva la acción igual que cuando empaquetas un regalo.

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Explorando la respiración

En yoga una respiración está compuesta por una inspiración, cuando coges el aire y una espiración, cuando sueltas el aire. Esto en principio. Y esta acción de respirar en dos tiempos el de coger y soltar el aire al principio cuesta.

Cuesta porque haces consciente una acción que ha sido inconsciente la mayor parte de tu vida. Cuesta porque muchas respiramos por la boca sin darnos cuenta y tener la intención de respirar por la nariz, cuesta. Cuesta también porque coordinamos la respiración con el movimiento y a veces nos quedamos cortas y otras veces se acelera el ritmo. Y por eso cuesta.

Pero igual que cuando aprendes a conducir o cuando has interiorizado un proceso que al principio te costaba y ahora haces sin darte cuenta, llega un momento en que respiras y coordinas con fluidez y en ese momento la respiración no es solo inspirar y espirar. Hay otras dos acciones  innacciones: las retenciones en lleno y en vacío.

Retenciones

Cuando inspiras (y acuérdate que en yoga intentas que el aire baje bien al abdomen, movilizando todo el tronco hasta llegar a sentir el movimiento desde el pecho hasta el abdomen) no espiras directamente. Hay un momento en el que hay una pausa antes de empezar con la espiración. A esa pausa se la llama retención en lleno.

Y lo mismo pasa con la espiración. A medida que vas soltando el aire desde abajo, desde el abdomen hasta sentir como baja la caja torácica vuelve a haber otro momento de pausa con una retención en vacío antes de volver a inspirar.

Estas retenciones son pausas en la acción. Justo antes de realizar la acción hay una pausa. De forma que la respiración que a priori tenía dos fases pasa a tener cuatro. Inspiración – Retención en lleno – Espiración – Retención en vacío. 

Estas son las cuatro fases de la respiración que con la práctica y el tiempo puedes llegar a modificar el ritmo. Para conseguirlo la técnica del vinyasa krama en la respiración ayuda a de forma consciente aplicar un ritmo. 

Dependiendo del día y de la postura de yoga, estas pausas se harán más evidentes. Es decir igual estás de dos hasta cuatro segundos en pausa con los pulmones en lleno y vacío y otros días y en otras posturas apenas un segundo.

Los días que sí fluyen las retenciones también puede ser que estés más cómoda en retenciones en lleno que en vacío o al contrario. Obsérvalo durante estas semanas en esas posturas que conoces y que son como un masaje como la mesa de dos patas: vipadapittam o cuando te coges las rodillas con las manos: apanasana, por ejemplo.  Y más adelante seguiremos profundizando 🤗

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